Un día acudí a mi oficina de mi banco habitual. Me ofrecieron como producto seguro, rentable y líquido. En concreto, unas participaciones preferentes de la entidad. Pasados los años resultó que las participaciones preferentes no podían ser rescatadas. Además valían muy poco. Ferrer-Bonsoms, Abogados se encargaron de mi asunto, prepararon una demanda y acudieron a vía judicial. Ya tenemos la Sentencia favorable que además es firme.
Ya he recuperado el dinero que tenía invertido en participaciones preferentes. Los recomiendo como expertos en Derecho Bancario.